• Noticias
  • 18/Feb/2014

Otra muerte que oscurece a Barracas


Facundo Ambrosi salió a la terraza del cuartel de bomberos y vio, a lo lejos, el humo negro que ascendía. El incendio en el depósito de Barracas, comprobó, era más grande de lo sospechado.

Un rato antes, sus compañeros habían dejado el cuartel a bordo de la autobomba. Era la mañana del miércoles 5 de febrero. Alarmado por la dimensión del fuego, Facundo bajó las escaleras, salió solo a la calle y apuró el paso hasta llegar al galpón.

Poco después de unirse a la dotación de bomberos voluntarios de Vuelta de Rocha, lo sorprendió, como a todos, el derrumbe de uno de los paredones. Quedó con medio cuerpo atrapado debajo de los escombros. Estuvo once días internado en terapia intensiva. Ayer, poco después del mediodía, sufrió muerte cerebral. Tenía 25 años.

De esta manera, ya son diez las víctimas fatales del incendio en el depósito de Iron Mountain. Seis bomberos de la Policía Federal, dos agentes de Defensa Civil de la Ciudad y dos bomberos voluntarios del cuartel de Vuelta de Rocha.

Facundo estaba internado en coma farmacológico en el Hospital Argerich. Sufría un cuadro de insuficiencia pulmonar, por lo que recibía asistencia respiratoria. Además, debido al derrumbe, se le habían quebrado la tibia y el peroné de ambas piernas, el antebrazo derecho y la cadera.

Tras una intervención quirúrgica en la cabeza y una endoscopia, falleció ayer a las tres de la tarde.
Tenía tres hijos: Abel de seis años, Tiana de dos y Gael de apenas dos meses. Vivía en Garibaldi 1940, a tan sólo una cuadra del cuartel. Era el hijo menor de Nora Fernández y Ricardo Ambrosi. Como su padre era jefe de Bomberos, desde chico frecuentó el cuartel de Vuelta de Rocha.

Y con el correr de los años ascendió en el escalafón: pasó de ser aspirante de cadete a cadete, de aspirante de bombero a bombero. El sábado anterior al trágico incendio fue el cumpleaños número 25 de Facundo. Los bomberos, amigos y familiares suyos se juntaron a comer un asado en el cuartel. Escucharon música electrónica, género que a él le fascinaba. “Compartíamos todo.

El estaba siempre en el cuartel, vivía ahí. De hecho, tenía una piecita en el primer piso en donde a veces se quedaba a dormir. Era un pibe con una calidad de persona gigante. Muy humilde y solidario. Esto es un balde de agua helada para nosotros”, dijo uno de sus compañeros, Diego Armand.

El director de Bomberos Voluntarios de Vuelta de Rocha, Antonio Sette, confirmó que Facundo era donante de órganos. “Esto no hace más que resaltar lo que él era como persona.

No hace más que subrayar su vocación solidaria.” Sette recordó a la décima víctima como “un vecino, un amigo de acá del barrio”. “Facu nació acá y la mayoría lo conocíamos desde la panza de su mamá. Hizo su vida en el cuartel, se crió acá.

Por eso, durante todos estos días en que estuvo internado, el cuerpo de bomberos estuvo pendiente afectiva y psicológicamente de su salud. Considerábamos, igual, que la mejor forma de mandarle buena onda era que funcionáramos normalmente”, agregó el director. Tras la muerte de Facundo, el Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios dispuso luto por tres días.

Ayer a la noche se esperaba la llegada del cuerpo de Facundo para que fuera velado en el cuartel, ubicado en Garibaldi 2042. Durante toda la tarde se acercaron hasta allí familiares y amigos de la víctima. Muchos de ellos pertenecían a la murga de La Boca, en donde Facundo tocaba el bombo. Jennifer Maceiro, la madre de su primer hijo, vestida con una remera con la cara de Facundo estampada, recibía los abrazos de los familiares.

“Se me fue la mitad de mi vida. ¿Por qué Facu?, me pregunto. ¿Por qué le tuvo que tocar a él? Tengo 24 años y se me fue la mitad de mi vida. El fue mi primer novio. Era un chico que estaba siempre activo. Me decía ‘vamos a tomar mate, vamos a limpiar el camión’, no se podía quedar quieto.” Además, Jennifer contó que su hijo Abel “es idéntico a Facu, incluso está en la escuela de cadetes y yo soy su instructora”. “Quiero que lo recuerden como a un héroe, como realmente fue: una persona que daba la vida por los demás.”

Con la muerte de Facundo, el número de fallecidos en el depósito de Iron Mountain ascendió a diez. Las víctimas son el comisario inspector Leonardo Day, la subinspectora Anahí Garnica, los cabos primero Damián Béliz y Eduardo Adrián Canessa y los agentes Juan Matías Monticelli y Maximiliano Martínez, de la Policía Federal. También murieron los rescatistas Pedro Barícola y José Méndez, de Defensa Civil de la ciudad de Buenos Aires, y Sebastián Campos, del cuartel de Vuelta de Rocha y compañero de Ambrosi.

A 12 días del incendio hay todavía un bombero de la Policía Federal internado, Luis Díaz Gauna, quien se encuentra en el hospital Churruca “con politraumatismos, pero estable y fuera de peligro”, confirmaron fuentes de la fuerza.

Fuente y foto: http://www.pagina12.com.ar

2024 - Bomberos Voluntarios de Argentina - Sistema Nacional de Bomberos Voluntarios de la Republica Argentina